Vladimir Putin, presidente de Rusia, aprobó cambios en la ley que rige las elecciones presidenciales, aumentando las restricciones sobre la cobertura mediática.

Los cambios se hicieron antes de unas elecciones en marzo en las que se espera Putin, que ha gobernado Rusia los últimos 24 años, busque un nuevo mandato de seis años. Sin embargo, el presidente no ha confirmado si se presentará.

¿Putin quiere mantener el control?

Estas medidas han sido duramente criticadas por organizaciones internacionales defensoras de la libertad de prensa, quienes consideran que limitar la cobertura mediática de las elecciones presidenciales es un intento de Putin de mantener el control sobre el proceso electoral.

La organización Human Rights Watch señaló que estas restricciones son un claro ejemplo de la creciente represión a la libertad de expresión en Rusia. Además, Amnistía Internacional denunció que estas medidas van en contra de los estándares internacionales de derechos humanos y la Declaración Universal de Derechos Humanos.

La limitación de medios independientes y periodistas subcontratados es una clara estrategia para mantener el monopolio de la información por parte del gobierno. El hecho de que solo los periodistas contratados en medios registrados puedan cubrir las reuniones de la comisión electoral deja afuera a aquellos que podrían tener una visión crítica o discrepancias con el gobierno.

La limitación de la información es una constante

Por otro lado, la prohibición de cobertura en bases militares o zonas bajo ley marcial sin autorización previa también levanta sospechas sobre la transparencia del proceso electoral. Esto podría ocultar posibles irregularidades o manipulaciones en las elecciones presidenciales.

Es importante destacar que estas restricciones no son algo nuevo en Rusia. Desde hace años, el gobierno de Putin ha implementado diversas medidas para controlar la información y acallar voces disidentes. La prohibición de sitios web y servicios de redes sociales como Facebook e Instagram es solo una muestra de estas acciones.

A pesar de estas limitaciones, muchos ciudadanos rusos han encontrado maneras de eludir la censura y acceder a información independiente. El uso de herramientas tecnológicas y redes privadas virtuales les ha permitido seguir informados y expresar sus opiniones libremente.