En un acto irracional y simulando lo que ocurre en las películas de acción, un hombre de nacionalidad rusa intentó saltar de un edificio a otro con un vehículo.

Para lograr su cometido, en el borde de la azotea de una edificación instaló una rampa, de modo que el salto fuera pronunciado y pudiera llegar al otro punto, cuya distancia era cercana a los cinco metros.

Así fue el fallido salto

Sin embargo, en la mitad del salto, la parte delantera del automóvil se inclinó hacia abajo, haciendo que impacte contra la muralla de la otra infraestructura.

Tras no lograr su intención, el auto cayó desde una altura similar a la que se encuentra un quinto piso; vale decir, alrededor de 20 metros. Al tocar suelo, el conductor salió por el parabrisas de su auto, totalmente destruido, y comenzó a trotar hasta encontrarse con otra persona.

Increíblemente, pese a la gravedad del hecho, el protagonista de este insólito viral resultó ileso.

No es la primera vez que un ruso protagoniza una «locura extrema»

En 2015, un ruso realizó otra «locura», quizá más peligrosa que el intento frustrado del automovilista. El aficionado a las actividades de alto riesgo, Alexánder Chérnikov, saltó al vacío desde un quinto piso, sin protecciones. No sufrió ningún tipo de herida.

Ese mismo año, Chérnikov subió la apuesta con otro salto. Desde el noveno piso de un edificio (una altura de 30 metros) y con su cuerpo en llamas, se lanzó al vacío y apagó el fuego en un montículo de nieve. También salió ileso.+

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