Londres.- El primer ministro del Reino Unido, Keir Starmer, ha convocado una nueva reunión del gabinete de emergencia, conocido como COBRA, en Downing Street, para abordar los desórdenes violentos que han sacudido al país en los últimos días. Esta medida busca hacer frente a la ola de violencia generada por grupos vinculados con la extrema derecha, que ha causado alarma en diversas ciudades británicas.

Medios locales como la BBC han confirmado que varios ministros del Ejecutivo laborista, así como portavoces y jefes de policía, se unirán a esta reunión con el primer ministro por la noche, siendo la segunda en 24 horas luego de la llevada a cabo el lunes. Tras la conclusión del comité de emergencia, Starmer ha prometido que los responsables de la violencia serán llevados ante la justicia y ha anunciado la creación de una unidad permanente de 400 agentes de policía especializados para hacer frente a disturbios como los ocurridos recientemente.

Desde hace una semana, protestas violentas, alentadas por grupos de ultraderecha, han agitado las principales ciudades del Reino Unido, incluida la capital, Londres. Este jueves, se tienen programadas unas 30 concentraciones en las cercanías de centros de inmigración, lo que ha generado preocupación entre la población y las autoridades.

El detonante de esta escalada de violencia fue el trágico incidente registrado el 29 de julio en Southport, al noroeste de Inglaterra, donde tres niñas perdieron la vida y varios menores resultaron heridos en un ataque en un centro recreativo. El autor del crimen, Axel Rudakubana, un joven de 17 años nacido en Gales de padres ruandeses, tiene acusaciones de asesinato e intento de asesinato, sin embargo, la difusión de falsos rumores en línea sobre su estatus migratorio ha avivado la indignación de los grupos de ultraderecha.

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