Sudán ha levantado la suspensión por fuerza mayor impuesta durante casi un año al transporte de crudo desde su vecino Sudán del Sur a un puerto del mar Rojo tras la mejora de las condiciones de seguridad, según una carta a la que tuvo acceso Reuters el lunes.

Jartum declaró la fuerza mayor en marzo del año pasado, después de que el principal oleoducto que transporta petróleo desde Sudán del Sur a través de Sudán para su exportación sufriera paradas relacionadas con problemas derivados de la guerra entre el ejército sudanés y las insurgentes Fuerzas de Apoyo Rápido.

En la carta del Ministerio de Energía y Petróleo de Sudán fechada el 4 de enero y dirigida al ministro de Energía de Sudán del Sur, Jartum afirmaba que levantaba la fuerza mayor basándose en los nuevos acuerdos de seguridad que había alcanzado con Yuba y BAPCO, la empresa sudanesa que gestiona el oleoducto, para garantizar el flujo seguro del petróleo.

«Por la presente levantamos la fuerza mayor», escribió el ministro sudanés de Energía y Petróleo, Mohiedienn Naiem Mohamed Saied, al ministro sursudanés de Petróleo, Puot Kang Chol.

Un funcionario del Ministerio de Energía de Sudán confirmó que la carta era auténtica.

El oleoducto Petrodar, creado por un consorcio que incluye a las empresas chinas CNPC y Sinopec, así como a la malasia Petronas, recorre más de 1.500 kilómetros desde la cuenca del Melut, en el estado del Alto Nilo, hasta Puerto Sudán (también conocido por su nombre en inglés, Port Sudan), en la costa sudanesa del mar Rojo.

Otro oleoducto transporta petróleo desde el estado sursudanés de Unity hasta Puerto Sudán.

Sudán del Sur había estado bombeando unos 150.000 barriles diarios de crudo a través de Sudán para su exportación, según una fórmula establecida cuando Sudán del Sur se independizó de Jartum en 2011.

Sudán se sumió en un conflicto civil en abril de 2023 y los enfrentamientos han desatado oleadas de violencia étnica y creado la mayor crisis de desplazados internos del mundo.