Al menos 15 periodistas, once de ellos palestinos, han muerto debido al conflicto entre Israel y Hamás, así lo informó el Comité para la Protección de los Periodistas (CPJ).

El CPJ también reporta que tres comunicadores están desaparecidos o detenidos, dos de ellos palestinos y uno israelí, así como ocho heridos. Ante ello, exigió a las partes en conflicto respetar la seguridad de los reporteros.

El Comité indicó que no ha podido confirmar que todos los incluidos en la lista fallecieron o desaparecieron mientras desempeñaban su labor. Ante ello continúan con la investigación y estiman que las víctimas podrían aumentar, debido a que el conflicto sigue.

Tan solo el 7 de octubre, el día que Hamás lanzó una serie de ataques por sorpresa contra militares y civiles en Israel, tres reporteros israelíes murieron por disparos y tres palestinos por fuego israelí.

En los días posteriores se registraron más muertes de reporteros, todos ellos palestinos, a excepción de un libanés. La mayoría de las víctimas trabajaban para canales palestinos o árabes. Mientras que Issam Abdallah, un videógrafo de Reuters, murió en la frontera libanesa por un ataque por parte de Israel.

Este bombardeo de Israel también dejó a dos periodistas heridos. Uno de ellos labora en la agencia AFP y otro en el canal de televisión Al Jazeera.

Tras estos hechos, el coordinador del CPJ en la región árabe, Sherif Mansour, indicó que los periodistas son civiles que hacen un importante trabajo y que no deben ser víctimas de ataques por las partes en conflicto, en este caso Israel y Hamás.

En cuanto a los comunicadores desaparecidos, se trata del fotógrafo israelí Roee Idan, quien fue tomado como rehén junto a su hija de tres años por Hamás, según su propia familia. Mientras que el fotógrafo palestino Nidal al-Walidi, fue detenido por el Ejército israelí. Un tercer fotógrafo palestino está desaparecido.

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