Suspenden ejecución de asesino serial por ‘fallas técnicas’: Idaho
28/02/2024 - Hace 10 meses en InternacionalSuspenden ejecución de asesino serial por ‘fallas técnicas’: Idaho
Idaho, Estados Unidos, se vio envuelto en una situación inusual este miércoles cuando la ejecución de Thomas Creech, uno de los condenados que más tiempo lleva en el corredor de la muerte, fue suspendida debido a la imposibilidad del equipo médico de insertarle la sonda intravenosa.
Creech, un hombre de 73 años y de raza blanca, estaba programado para recibir una inyección letal con pentobarbital (un sedante potente) en el Instituto Correccional del Estado de Idaho, al sur de Boise, a las 10:00 hora local. Sin embargo, tras más de 45 minutos de intentos fallidos para insertarle la sonda, las autoridades decidieron suspender la ejecución y devolver al recluso a su celda.
El estado de Idaho es conocido por ser uno de los menos activos en cuanto a la pena de muerte en Estados Unidos, habiendo ejecutado a solo tres personas desde que se reintrodujo la pena capital en 1976, la última de ellas hace 12 años. Creech, quien ha pasado más de 50 años en prisión y más de 40 en el corredor de la muerte, fue condenado originalmente por los asesinatos de John Wayne Bradford y Edward Thomas Arnold en 1974 en Idaho, aunque esta sentencia fue luego conmutada por cadena perpetua.
¿Quién es Thomas Creech?
A lo largo de su vida criminal, Creech admitió cerca de 40 asesinatos, aunque las autoridades han expresado escepticismo sobre su veracidad debido a la posibilidad de que hayan sido confesiones hechas bajo coacción. Se le considera responsable de al menos 11 asesinatos, incluyendo el asesinato de David Dale Jensen en la cárcel mientras cumplía su cadena perpetua.
Además, también había sido condenado en el estado de Oregon por el asesinato en 1974 de William Joseph Dean y en California por el de Vivian Grant Robinson en el mismo año.
Las ejecuciones con inyección letal han enfrentado problemas en los últimos años, especialmente en casos como el de Creech, un preso de avanzada edad con complicaciones de salud que dificultan la inserción de sondas intravenosas. Otros estados, como Alabama, han comenzado a explorar métodos alternativos de ejecución, como la asfixia con gas nitrógeno.
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