Taiwán expresó su rechazo hacia la decisión del Gobierno chino de alterar unilateralmente su ruta aérea en el estrecho que separa ambos territorios. Esta medida ha sido condenada por las autorid ades de Taipéi, quienes sostienen que China busca modificar el ‘statu quo’ en la zona, posiblemente con fines militares, al considerar a Taiwán una provincia bajo su soberanía.

El Consejo de Asuntos del Continente ha advertido que la acción china ignora la seguridad de los vuelos y muestra una falta de respeto hacia Taiwán. Esta modificación podría implicar que los vuelos comerciales pasen más cerca de la línea media, la frontera aérea ‘de facto’ entre ambas partes. Además, el organismo ha dejado claro que si China persiste en su postura, deberá enfrentar graves consecuencias que afectarán las relaciones bilaterales.

La Administración de Aviación Civil de China anunció previamente la «cancelación del desvío» de la ruta actual, que va de norte a sur, y la activación de nuevas rutas que atraviesan de oeste a este, en dirección a Taiwán. Esto significa que las aeronaves civiles volarían a tan solo 10 kilómetros de la línea media.

Durante años, esta línea ha funcionado como una frontera no oficial entre Taiwán y China. Sin embargo, Pekín se niega a reconocer su existencia y ha intensificado la presencia de aviones de combate en la zona para presionar a la isla a aceptar sus reclamos. El Ministerio de Defensa de Taiwán ha considerado que estas acciones «groseras y poco razonables» podrían aumentar las tensiones en la región.

Ante la posible entrada de aviones desconocidos en la zona de identificación de defensa aérea de Taiwán, el Ministerio ha dejado en claro que actuará conforme a los procedimientos operativos y las normas de gestión de emergencias para salvaguardar la seguridad del espacio aéreo. Por su parte, China ha minimizado la importancia de estas medidas.

En respuesta a las críticas, la Oficina de Asuntos de Taiwán ha calificado estos cambios como «rutinarios» y ha afirmado que tienen como objetivo aliviar la presión en el espacio aéreo. Asimismo, han dejado en claro que China no considera necesario abordar estas cuestiones previamente con las autoridades de Taiwán.