El líder supremo de los talibanes, Hibatullah Akhundzada, pidió al mundo no «entrometerse» en los asuntos de Afganistán y aseguró que la aplicación de la ley islámica es la clave del éxito en su país.

Akhundzad, normalmente se mantiene retirado de la vida pública, sin embargo, tomó la palabra ante una asamblea de eruditos religiosos, misma que fue convocada por el régimen para consolidar su poder.

«Nos dicen: ‘¿Por qué no hacen esto, por qué no hacen aquello? ¿Por qué el mundo se entromete en nuestros asuntos? No aceptaremos directivas de nadie. Sólo nos inclinaremos ante Alá Todopoderoso«, mencionó.

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El líder no había sido captado en fotografías, ni en video en público desde la llegada de los talibanes al poder en agosto de 2021. Solo se habían difundido grabaciones de audio con su voz.

Los talibanes han establecido estrictas medidas que afectan principalmente a mujeres y niñas. Las mujeres han sido excluidas en gran medida de los empleos públicos y les restringieron su derecho a desplazarse. Además, a las niñas les prohibieron asistir a la escuela.

Mientras que en el pasado mes de mayo, los talibanes ordenaron que las mujeres se cubrieran completamente en público, incluido el rostro, idealmente con burka. Esta ropa tradicional solo tiene una rejilla de tela sobre los ojos que permite a la mujer ver, pero no ser vista.

Hibatullah Akhundzada, líder supremo de los talibanes

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