¡Escándalo en la frontera! Texas presentó una demanda contra el gobierno del presidente Joe Biden por permitir que la Patrulla Fronteriza corte el alambre de púas colocado por el estado en su frontera con México para evitar la migración ilegal. Esta acción ha generado controversia y ha llevado a Texas a tomar medidas legales para proteger su propiedad y sinergia con el gobierno federal en temas migratorios.

El fiscal estatal de Texas, Ken Paxton, expresó su preocupación por las acciones de la Patrulla Fronteriza, asegurando que «regularmente» cortan la cerca de alambre y, en ocasiones, lo hacen «inmediatamente» después de que trabajadores de Texas han colocado alambre nuevo para cubrir los huecos existentes. Paxton argumenta que al cortar el alambre de púas, el gobierno federal ha «destruido ilegalmente la propiedad del Estado de Texas y ha interrumpido los esfuerzos de disuasión» del gobernador Greg Abbott para detener la inmigración indocumentada.

Esta demanda se presentó contra el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) y su titular, Alejandro Mayorkas, así como contra la Patrulla Fronteriza y varias otras agencias y funcionarios que, según Paxton, han ayudado y alentado los cruces fronterizos ilegales.

En su querella, Paxton pide al Tribunal Federal del Distrito Oeste de Texas que prohíba a las autoridades federales «continuar destruyendo y dañando propiedad privada» en la frontera.

¿Qué podemos esperar del conflicto migratorio entre Texas y el gobierno de EU?

El alambre de púas ha sido utilizado por Texas para fortalecer su seguridad fronteriza y evitar el ingreso ilegal de personas. Sin embargo, esta acción de la Patrulla Fronteriza ha generado tensiones entre el estado y el gobierno federal, colocando en el centro del debate el manejo de la crisis migratoria en la frontera sur de Estados Unidos.

Hasta el momento, el gobierno de Biden no ha emitido comentarios sobre esta demanda, pero es probable que la situación se vuelva más tensa a medida que el caso avance en los tribunales. Los expertos señalan que esta disputa legal entre Texas y el gobierno federal podría tener un impacto significativo en la política migratoria, ya que sentaría un precedente sobre la colaboración y los límites de acción entre los estados y el gobierno central en temas de seguridad fronteriza.

Sin duda, este conflicto en la frontera entre Texas y el gobierno de Biden promete mantenerse en los titulares y genera incertidumbre sobre cómo se manejará la situación migratoria en el futuro cercano.

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