El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha dado luz verde a las redadas antimigrantes en lugares considerados hasta ahora como «protegidos» como escuelas, iglesias y hospitales.

Esta decisión de Trump ha sido anunciada por el Departamento de Seguridad Nacional (DHS) este martes 21 de enero, revocando una directriz previa de la Administración de Joe Biden que instruía a evitar redadas antimigrantes en estos lugares o cerca de ellos.

Según un portavoz del DHS, esta medida permitirá a los agentes de migración seguir las leyes y capturar a los que consideran «criminales extranjeros». El Gobierno alega que hay personas que se esconden en las escuelas y las iglesias para evitar ser arrestadas. Aunque no se han proporcionado pruebas concretas que respalden esta afirmación.

Emergencia nacional en la frontera

En su primer día en la presidencia, Trump declaró una «emergencia nacional» en la frontera con México, allanando el camino para deportaciones masivas de migrantes.

Mediante decretos firmados en el Despacho Oval, el mandatario emitió órdenes ejecutivas para militarizar la frontera. Así como para prohibir la entrada de migrantes y deportar a los más de 11 millones de personas que viven en Estados Unidos sin estatus legal.

Durante su discurso, Trump señaló que su deber es defender al país de amenazas e invasiones, y que hará todo lo necesario para lograrlo. La orden ejecutiva autoriza el uso de fuerzas militares en la frontera con México para asegurar la zona y repeler formas de invasión. Incluyendo la migración y el tráfico de drogas.

Además, se ordena la deportación inmediata de todos los migrantes que entren de manera irregular en Estados Unidos. También se restaura el programa ‘Permanece en México‘, que obliga a los migrantes a esperar en el país vecino mientras sus casos están en proceso.

Fin del CBP One

El presidente también puso fin a dos programas implementados por su predecesor destinados a disuadir la migración irregular: la aplicación móvil CBP One y el permiso humanitario (conocido como ‘parole’) para ciudadanos de Cuba, Nicaragua, Haití y Venezuela.

Mediante CBP One, los migrantes que se encontraban en territorio mexicano podían completar un formulario con sus datos y solicitar una cita para presentarse en un puerto de entrada de la frontera sur.

Esta aplicación, que comenzó a operar en enero de 2023, permitió que más de 930 mil personas se presentaran para que las autoridades procesaran sus casos, según el Departamento de Seguridad Nacional (DHS).

También te puede interesar:

• Dieciocho estados demandan a Trump por eliminar la ciudadanía por nacimiento