Ante la proximidad de las elecciones presidenciales en Estados Unidos, el expresidente Donald Trump ha vuelto a poner en duda la validez y transparencia del proceso electoral, denunciando lo que él llama «trampas a gran escala».

Estas acusaciones se suman a una larga lista de declaraciones controvertidas por parte del candidato republicano, quien ha sido reacio en el pasado a aceptar los resultados de las elecciones. En particular, Trump ha dirigido sus críticas hacia el estado de Pensilvania, uno de los estados clave en la contienda electoral.

En un discurso reciente, el exmandatario afirmó que se están llevando a cabo «trampas a una escala nunca vista antes» en dicho estado, insinuando que podría no reconocer los resultados si no le favorecen.

Estas acusaciones se basan en una serie de irregularidades detectadas por las autoridades electorales, incluyendo la apertura de una investigación sobre un lote de 2.500 solicitudes de inscripción electoral que contenían información de identidad incorrecta en un condado de Pensilvania.

Aunque las autoridades están realizando verificaciones en otros condados, Trump ha aprovechado estas situaciones para sembrar dudas sobre la integridad del proceso electoral.

El gobernador demócrata de Pensilvania, Josh Shapiro, ha criticado duramente las afirmaciones de Trump, acusándolo de intentar crear caos y avivar las divisiones y el miedo entre la población. Shapiro recordó que en las elecciones de 2020, Trump perdió en Pensilvania por una estrecha diferencia de 80.000 votos frente a Joe Biden, lo que parece haber dejado una profunda huella en el expresidente.

Las acusaciones de Trump no son nuevas

Desde su derrota en las elecciones de 2020, el candidato republicano ha mantenido una postura desafiante frente a los resultados electorales, llegando incluso a impulsar una insurrección el 6 de enero de 2021, cuando sus seguidores asaltaron el Capitolio en un intento por impedir la certificación de la victoria de Biden.

Ante estas afirmaciones, las autoridades electorales han reiterado su compromiso con la transparencia y la legalidad en el proceso electoral, asegurando que se están tomando todas las medidas necesarias para garantizar la integridad de las elecciones.

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