El presidente electo Donald Trump seleccionó a Charles Kushner, padre de su yerno Jared Kushner, como el próximo embajador de Estados Unidos en Francia. La noticia fue anunciada este sábado a través de una publicación en Truth Social, la plataforma de medios sociales del propio Trump.

Trump afirmó que está encantado de nombrar a Kushner como embajador en Francia, describiéndolo como un defensor comprometido que representará los intereses de Estados Unidos de manera excepcional. Además, es un empresario altamente exitoso, filántropo y negociador, destacando su profunda experiencia en la industria inmobiliaria.

La conexión familiar entre Charles Kushner y Jared Kushner, quien está casado con la hija de Trump, Ivanka, también fue destacada en el anuncio. Trump señaló que Kushner ha trabajado estrechamente con él en importantes iniciativas durante su mandato en la Casa Blanca, incluyendo la Operación Warp Speed, la reforma de la justicia penal y los históricos Acuerdos de Abraham en Medio Oriente.

Es importante recordar que Kushner fue indultado por Trump en 2020 tras una condena en 2005 por varios cargos federales. Chris Christie, quien fue fiscal de los Estados Unidos para Nueva Jersey durante el caso contra Kushner, lo describió en su momento como alguien que cometió «uno de los crímenes más detestables y repugnantes» que había visto.

En aquella ocasión, Kushner fue declarado culpable de evasión fiscal, represalia contra un testigo federal y mentir a la Comisión Federal de Elecciones. Como parte de sus acciones delictivas, Kushner orquestó un plan para intimidar a un testigo al contratar una prostituta para engañarlo y grabar un encuentro comprometedor.

El nombramiento de Kushner como embajador en Francia genera diversas reacciones en la opinión pública. Mientras algunos aplauden la decisión de Trump y resaltan su capacidad empresarial, otros expresan preocupación por los antecedentes del nuevo embajador y su impacto en la diplomacia estadounidense en el extranjero.

Por su parte, Jared Kushner ha manifestado que no tiene planes de ocupar un cargo en el segundo gobierno de Trump. Durante un evento en Miami el pasado febrero, Kushner hijo declaró que su enfoque se encuentra actualmente en su firma de capital privado y en su vida personal.

A pesar de su retiro aparente de la política, se considera que la influencia de Jared sigue siendo relevante en los esfuerzos del próximo gobierno en el Medio Oriente. Diplomáticos regionales y aliados de Trump han señalado la importancia estratégica de Jared en la región, a pesar de que no asuma un rol formal en la administración.

Desde que Trump dejó la presidencia en 2021, tanto Jared como su esposa, Ivanka Trump, han mantenido un perfil discreto en el ámbito público. La pareja se ha mudado a Miami y se ha enfocado en proyectos empresariales, incluyendo la fundación de un fondo de inversión respaldado por fondos soberanos del Golfo.

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