Tras el reciente lanzamiento de un misil balístico ruso de alcance intermedio contra la ciudad de Dnipró, investigadores ucranianos han iniciado una minuciosa inspección de los restos desintegrados y calcinados del arma. Este nuevo misil, bautizado por Rusia como Oreshnik (avellano), ha provocado gran preocupación en Ucrania, ya que se trata de la primera vez que utilizan un arma de tal potencia en el conflicto.

Los expertos de Kiev se encuentran en un hangar de una instalación donde se realizan análisis forenses de armas, estudiando los restos en busca de información sobre las cadenas de suministro, la producción de material militar ruso y la posibilidad de desarrollar contramedidas efectivas. Este tipo de investigaciones resultan fundamentales para la seguridad nacional de Ucrania y su capacidad de defensa ante futuros ataques.

Según declaraciones de las autoridades ucranianas, el misil balístico alcanzó una velocidad máxima de más de 13.000 kilómetros por hora en su trayectoria hacia Dnipro el jueves pasado. Se estima que los misiles balísticos de alcance intermedio pueden recorrer hasta 5.500 kilómetros, lo que los convierte en un arma altamente destructiva y letal en el campo de batalla. Reuters tuvo acceso a los restos del misil el pasado domingo, aunque por motivos de seguridad se mantuvo en secreto la ubicación exacta del lugar.

La evaluación preliminar de los expertos de Ucrania

Dos expertos estatales realizaron evaluaciones preliminares sobre el arma, confirmando su naturaleza balística y su capacidad para causar daños civiles. Sin embargo, se reservaron para brindar información adicional hasta realizar un estudio más detallado de los restos. La OTAN convocó una reunión de urgencia tras el lanzamiento del misil ‘Oréshnik’ por parte de Rusia, considerando este hecho como una escalada en el conflicto armado en curso.

Líderes occidentales, como el primer ministro polaco Donald Tusk y el canciller alemán Olaf Scholz, expresaron su preocupación por esta nueva amenaza global y la necesidad de encontrar soluciones. La inteligencia militar ucraniana reveló que el misil pudo haber sido lanzado desde el complejo de misiles Kedr en Rusia, siguiendo una trayectoria que lo llevó rápidamente hacia su objetivo en Dnipró. Con seis cabezas de guiado y submuniciones, el ‘Oréshnik’ alcanzó una velocidad superior a Mach 11 en su tramo final, lo que resalta su letalidad y dificultad de interceptación.

La OTAN ha reiterado su compromiso de brindar asistencia militar a Ucrania en medio de esta escalada de violencia, asegurando que no cambiará su apoyo al país ante amenazas como el reciente lanzamiento del misil ruso. El rumbo del conflicto sigue siendo incierto, pero Ucrania trabaja incansablemente para fortalecer su capacidad de defensa y proteger a su población de futuros ataques.

Te puede interesar: Revelan fotos inéditas de Liam Payne en estado inconsciente antes de su muerte