Sudáfrica.– Los científicos sudafricanos han puesto en marcha una estrategia innovadora para proteger a los rinocerontes de la caza furtiva que los ha colocado en peligro de extinción. A través de la utilización de material radiactivo, buscan disuadir a los cazadores y facilitar su detección en los puestos fronterizos.

En Sudáfrica, el 80% de la población mundial de rinocerontes blancos se encuentran bajo amenaza debido a la caza ilegal impulsada por la demanda de sus cuernos en mercados asiáticos. Estos animales, que son víctimas de la caza furtiva en busca de sus cuernos, se encuentran en una situación crítica en términos de supervivencia.

En un orfanato de rinocerontes en la provincia nororiental de Limpopo, un grupo de científicos ha comenzado a inyectar material radiactivo en los cuernos de las criaturas para hacerlos inútiles y tóxicos para el consumo humano. Esta técnica permite identificar a los rinocerontes tratados a través de detectores de radiación, lo cual facilita su protección y la detección de posibles cazadores furtivos.

El proyecto, liderado por James Larkin de la Universidad de Witwatersrand, ha despertado esperanzas en la comunidad conservacionista. A pesar de los esfuerzos previos como el descuerne de los rinocerontes o su envenenamiento, la caza ilegal seguía siendo un problema persistente. Sin embargo, el uso de material radiactivo podría ser la clave para poner fin a esta práctica devastadora.

El proceso de inyectar el material radiactivo en los cuernos de los rinocerontes ha sido descrito como un procedimiento delicado y ético por parte de los científicos involucrados. Se espera que esta tecnología, que permanece activa durante cinco años, proporcione una protección efectiva a los rinocerontes y desaliente a los cazadores furtivos de continuar con sus actividades ilegales.

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