El presidente ruso, Vladímir Putin, ha tomado a todos por sorpresa al anunciar que se postulará nuevamente como candidato a la presidencia de Rusia en las elecciones que se llevarán a cabo en marzo del próximo año.

De esta manera, Putin podría mantenerse en el poder hasta el año 2030. Esta decisión ha generado gran repercusión y ha despertado múltiples interpretaciones por parte de la oposición y los analistas.

Putin quiere seguir en el mandato

El 17 de marzo de 2024 se llevarán a cabo los comicios que son considerados como un plebiscito sobre la guerra en Ucrania. Tanto el Kremlin como el Ejército de Rusia no han logrado cumplir los objetivos establecidos desde febrero de 2022 en dicho conflicto. Por lo tanto, estos comicios se convierten en una importante oportunidad para que el pueblo ruso exprese su opinión sobre el manejo de esta situación.

Aunque se esperaba que Putin anunciara su candidatura durante la conferencia de prensa anual programada para el próximo 14 de diciembre, el presidente ruso se adelantó casi una semana para hacer el anuncio. Durante una ceremonia en el Kremlin, Putin condecoró a varios militares con experiencia de combate en Ucrania y elogió su labor por «acabar completamente con el mito de la invulnerabilidad» del armamento occidental. Fue al finalizar este acto que Putin, en respuesta a las preguntas de los periodistas, confirmó su decisión de postularse por quinta vez como candidato presidencial.

Rusia a favor de su presidente actual

De acuerdo a un sondeo publicado por el Fondo de Opinión Pública, el 70% de los rusos apoya que Putin se presente nuevamente como candidato, mientras que solo un 8% prefiere que abandone la política. Además, un impresionante 78,5% de los rusos confía en el actual presidente, y un 75,8% aprueba su gestión al frente del Estado. Estas cifras demuestran la popularidad y respaldo que Putin aún mantiene en el país.

La Comisión Electoral Central (CEC) anunció que los rusos tendrán la posibilidad de votar durante tres días, del 15 al 17 de marzo de 2024. A pesar de las críticas por parte de la oposición, este mecanismo se utilizó por primera vez durante la pandemia, en el controvertido referéndum constitucional que permitió a Putin ejercer otros dos mandatos presidenciales de seis años cada uno. Sin embargo, la oposición argumenta que esta medida aumenta el riesgo de fraude electoral y dificulta el control del escrutinio, al igual que el voto electrónico.