Moscú.- Un violento motín ha estallado en el penal 19 (IK-19) de la región sureña de Volgogrado, Rusia, donde un grupo de presos ha tomado rehenes y causó la trágica muerte de al menos un guardia. Según informes del departamento de prensa del Servicio Federal Penitenciario (FSIN) ruso y la agencia de noticias TASS, al menos tres internos, portando insignias del Estado Islámico, se han alzado en armas al grito de «Alá es Grande».

Las autoridades penitenciarias confirmaron que el motín se desencadenó durante una reunión de la comisión disciplinaria en la prisión de alta seguridad de Volgogrado, donde los reos tomaron como rehenes a empleados de la institución penal. En estos momentos, se están llevando a cabo operativos para liberar a los rehenes y restablecer el orden en el complejo penitenciario.

Se ha abierto una causa penal por «captura de rehenes» por parte del Comité de Instrucción de Rusia, mientras que el FSIN federal ha desplegado un equipo de inspección para abordar la delicada situación. El presidente ruso, Vladimir Putin, ha enviado refuerzos para retomar el control de la situación y se espera la colaboración de las fuerzas de seguridad nacionales para resolver la crisis.

Motín en Volgogrado levanta alertas en Rusia

El IK-19 de la región de Volgogrado, con capacidad para albergar hasta 1.229 reclusos, se encuentra en la ciudad de Surovikino, donde se ha instalado un cuartel general operativo para coordinar las labores de liberación de los rehenes. A pesar de la tensa situación, las autoridades aseguran que no hay una amenaza para la población civil en la zona.

Este no es el primer incidente de este tipo en Rusia, ya que en junio pasado, prisioneros vinculados al Estado Islámico llevaron a cabo un asedio similar en una cárcel en la región sureña de Rostov. Las fuerzas especiales rusas lograron neutralizar a los captores y liberar a los guardias tras un enfrentamiento violento.

Las autoridades rusas están en alerta máxima debido a la creciente tensión por la migración y el aumento de los ataques terroristas en el país. En marzo, un atentado en un concierto en Moscú cobró la vida de 145 personas, siendo el ataque terrorista más letal en Rusia en dos décadas. La rama centroasiática de ISIS se atribuyó la responsabilidad del ataque, y los presuntos atacantes, ciudadanos de Tayikistán, se encuentran bajo detención preventiva.

ISIS ha amenazado con atacar a Rusia debido a su apoyo al líder sirio Bashar al Assad en la lucha contra el grupo terrorista en Medio Oriente. Con millones de migrantes de Asia Central viviendo en Rusia, las tensiones étnicas y los temores de nuevos ataques terroristas han llevado a una mayor vigilancia por parte de las autoridades locales.

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