El príncipe Harry alcanza un acuerdo histórico en demanda contra periódicos británicos. Con este resultado, reafirma su postura en contra de las prácticas invasivas de ciertos medios. En un hecho sin precedentes, el príncipe Harry logró resolver una demanda legal contra News Group Newspapers (NGN), propiedad del magnate de los medios Rupert Murdoch, por presuntas prácticas ilegales en la obtención de información. Según su abogado, citado por la agencia de noticias Reuters, el grupo mediático admitió haber llevado a cabo actividades ilícitas que afectaron directamente al duque de Sussex.
La demanda, que había sido presentada ante el Tribunal Superior de Londres, acusaba a NGN, editor de The Sun y del extinto News of the World, de recopilar de manera ilegal información personal del príncipe entre los años 1996 y 2011. Estas prácticas invasivas incluían la intervención telefónica al príncipe y a su entorno cercano, así como la invasión a la privacidad de su difunta madre, la princesa Diana.
El juicio, que estaba programado para comenzar esta semana junto a una demanda del exparlamentario Tom Watson, no llegó a celebrarse debido al acuerdo alcanzado entre ambas partes. El abogado del príncipe Harry confirmó que NGN aceptó su responsabilidad, pidió disculpas y se comprometió a pagar una compensación significativa por los daños ocasionados.
Un paso más en la lucha del príncipe Harry contra los medios británicos
Este acuerdo se suma a una serie de batallas legales emprendidas por el príncipe Harry contra medios británicos que, según él, han violado su privacidad en repetidas ocasiones. NGN ha admitido que The Sun y News of the World participaron en actividades inapropiadas que afectarán al hijo menor del rey Carlos III. Con este resultado, el príncipe Harry reafirma su postura en contra de las prácticas invasivas de ciertos medios y envía un mensaje claro sobre los límites que estos deben respetar. Este caso también pone bajo escrutinio a grandes conglomerados de noticias, obligándolos a responder por su comportamiento en el pasado.
La lucha del príncipe por proteger su privacidad y la de su familia continúa, marcando un hito en la relación entre la realeza y los medios de comunicación. Su determinación por hacer justicia en este caso histórico refleja su compromiso con la transparencia y el respeto a la intimidad de las personas de alto perfil.
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