Una jueza ha imputado a Nacho Cano, exintegrante del grupo Mecano, por emplear de manera irregular a unos 20 mexicanos en su espectáculo “Malinche” en Madrid.

Las autoridades informaron que Cano enfrenta acusaciones relacionadas con la violación de los derechos laborales y de los ciudadanos extranjeros. Además, el tribunal madrileño ha iniciado investigaciones sobre tres personas más vinculadas a la producción.

El comunicado oficial señala que la compañía de Cano reclutó a los bailarines en México bajo la falsa premisa de que serían “becarios”, pero en realidad trabajaron en el musical sin la debida autorización.

La compañía había prometido regularizar su estatus migratorio, pero esto nunca se concretó.

Cano, quien ha rechazado las acusaciones, podría enfrentarse a sanciones que van desde multas hasta varios años de prisión, según la agencia AFP.

La imputación surge tras una denuncia presentada en enero por una de las bailarinas mexicanas afectadas.

Cano, de 61 años y conocido por su trabajo con Mecano, considera que la denuncia está motivada por su apoyo a Isabel Díaz Ayuso, presidenta regional de Madrid y figura polémica en la política española. Cano ha expresado su descontento con las autoridades y criticado la investigación en diversos medios.

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