Una versión de ti en otra realidad podría ayudarte a resolver problemas y hacer realidad la vida de tus sueños. Se trata de una labor que debes encomendar a tu doble cuántico o tu “otro yo” a través de 3 demandas energéticas.

Esta bien, hasta acá todo puede sonar muy confuso. Vamos desde las bases.

En el año 1988, el doctor en Física, Jean-Pierre Garnier Malet, publicó La teoría del desdoblamiento del espacio y del tiempo que se basa en que todo en el universo está desdoblado, una parte como partícula (materia) y otra en onda (energía).

Entonces, todos tenemos un estado energético al que Garnier llama el doble, por lo que no es que estemos desdoblados, sino que somos nosotros mismos en un estado diferente, el cuerpo ondulatorio o energético, que se encuentra a velocidades superiores a la luz.

Es decir, en palabras más sencillas, que hay un “tú” que está viviendo la vida que deseas, que ha superado las pruebas que estás por enfrentar y que ha sido exitoso en todo lo que se ha propuesto. Sí, como el multiverso de Marvel.

Y lo mejor de todo es que puedes comunicarte con esa otra versión de ti en otro tiempo y espacio te ayude a resolver problemas y hacer realidad la vida de tus sueños.

El momento de contactarte con esa frecuencia es justo antes de irte a dormir.

Para hacerlo, se recomienda tomar un poco de agua para estar hidratado justo antes de ir a la cama. Estando acostado/a y entrando en esa fase de sueño REM, debes hablarle a tu “otro yo” como si fuera un amigo, a pesar de que seas tú mismo.

Procede a decir: “Quiero contactarme con mi yo cuántico que está viviendo la realidad de sus sueños”.

Seguidamente, debes identificarte: “Mi nombre es (tu nombre). Estoy en el año (XXXX), es el (fecha y día) y vivo en (tu país de residencia o en el que te encuentras)”.

Ahora, es momento de realizar tus 3 demandas energéticas:

1. Dime cómo logro crear la vida que quiero

2. Muéstrame el camino de menos esfuerzo

3. Muéstrame el camino de mayor satisfacción

Además, solicita que te lo diga a través de tus sueños.

Conserva una libreta al lado de tu cama para poder anotar lo que sueñes justo cuando te despiertes y comienza a trabajar por ello.

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