La Luna ejerce una influencia poderosa sobre la Tierra y sus habitantes, simbolizando nuestras emociones según la astrología.

A lo largo de su ciclo lunar de aproximadamente 29.5 días, experimentamos distintas fases que impactan nuestras emociones de manera única.

¿Cómo podemos utilizar estas fases para influir positivamente en nuestras emociones? Descúbrelo a continuación.

Durante la Luna Nueva, se recomienda realizar rituales de sanación y purificación. Esta fase es propicia para iniciar nuevos proyectos y visualizar el futuro deseado.

La Luna Creciente es ideal para avanzar en nuestros planes y proyectos, favoreciendo momentos de lucidez e iluminación.

La fase de Luna Llena puede intensificar nuestras emociones, por lo que es importante gestionarlas de manera saludable. Aprovecha esta energía para conectarte con tu intuición y liberarte de lo que ya no necesitas.

La Luna Menguante nos invita a cerrar ciclos y prepararnos para un nuevo comienzo, siendo un momento propicio para el autocuidado y la reflexión.

Cada fase lunar ofrece una oportunidad única para sanar, reflexionar y renovarnos emocionalmente.

Aprender a aprovechar el poder de la Luna puede ser invaluable para mejorar nuestro bienestar emocional y encontrar equilibrio en nuestras vidas.