El sahumerio es un incienso de plantas aromáticas, que se ha usado desde la antigüedad como parte de rituales para hacer limpiezas energéticas.

Te decimos cómo hacer uno de azúcar, laurel y canela para purificar los espacios de tu casa y atraer la abundancia económica y de oportunidades.

Su definición, la de “sahumar”, significa “perfumar una cosa con humo aromático”. En este caso, como usaremos laurel, canela y azúcar, ya te puedes imaginar la fragancia con la que quedará impregnado tu hogar.

Cuando se sahuma con laurel y canela se genera un ambiente vibracional positivo y estimulante que promueve la abundancia de dinero para las personas que habitan en tu hogar, de la mano de sus propiedades aromáticas.

La canela es el ingrediente principal de muchos rituales para el amor y el dinero, sobre los cuales ya hemos escrito. Esta especia es como el cristal de cuarzo del reino de las hierbas, ya que mejora cada intención que usas con él.

De la misma manera, las hojas de laurel atraen fortuna, protegen tus finanzas y purifica el dinero que adquieres.

El azúcar refinada representa la abundancia, como cada uno de sus cristales, infinitos, además de la dulzura de la intención que inspira este ritual.

Para hacerlo necesitarás:

-½ vaso de azúcar blanca refinada

-7 hojas de laurel secas

-1 cucharada de canela en polvo

-2 cucharadas de alcohol isopropílico

-1 plato

-Papel aluminio

Lo primero es recubrir el plato con papel aluminio para protegerlo. Luego vierte en forma de circunferencia el azúcar blanca refinada, coloca las hojas de laurel como si fueren pétalos de una flor, también en forma circular sobre el azúcar y añade la canela sobre el mismo patrón.

Échale las dos cucharadas de alcohol isopropílico y enciende en sahumerio con una cerilla.

Ten cuidado para que no te quemes, procura recoger tu cabello y ubicarlo en un lugar donde no tenga nada inflamable alrededor.

Puedes tomar unos guantes de cocina para mover el plato mientras el fuego está encendido y no quemarte.

Recuerda que el ritual de sahumar debe estar dirigido por mucha intención, que es este caso es la abundancia.

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