Ciudad de México.– Por más de dos décadas vivió con gusanos en su cerebro, se trata de un hombre de 38 años, vive en Estados Unidos pero es de Guatemala.

La persona estaba infectado de Taenia solium, que es un gusano plano parasitario que vivía en su cerebro, no lo sabía y no tenía ninguna secuela, pero un día se puso mal y detono el asunto.

Los reportes médicos indican que no se presentaron trastornos cardiovasculares, respiratorios, gastrointestinales, genitourinarios o neurológicos.

Asimismo tampoco tuvo antecedentes de epilepsia, pero fue una noche donde tuvo una convulsión muy fuerte que hizo que lo hospitalizaran.

Los análisis toxicológicos no arrojaron nada, incluso sin ninguna reacción a algún medicamento o algo parecido, en la tomografía se arrojaron tres lesiones calcificadas en su cerebro, producto de la anidación de quistes larvarios con las que contaba.

Tiene que tomar medicamentos anticonvulsivos durante el resto de su vida, le inflamación de su cerebro ya disminuyó.

Una de las posibilidades del porqué se infectó que fue carne de cerdo cruda o poco cocinada, ya que esos gusanos crecen entre dos y ocho metros y se colocan en el tracto intestinal y sus huevos parasitarios.

Los síntomas si se tiene ese parásito son dolores de cabeza, confusión, problemas de equilibrio, convulsiones e incluso hasta puede causar la muerte sino se atiende.

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