Ciudad de México.- “No soy partidario de la Ley del Talión, no creo en el ojo por ojo, diente por diente, porque si a esas vamos nos quedaríamos tuertos o chimuelos todos”, fue la respuesta del presidente Andrés Manuel López Obrador a la Arquidiócesis de México, que este fin de semana acusó una «mano blandengue» del Gobierno Federal ante la violencia.
López Obrador expuso este lunes en su conferencia de prensa que a diferencia de las administraciones pasadas, la suya no apostará a resolver problemas con medidas coercitivas o el uso de la fuerza.
“No se va a utilizar al Ejército ni a la Marina para reprimir al pueblo, y como se dice ahora, existe un ‘nuevo paradigma’ en materia de seguridad pública”, dijo.
A nivel personal, el presidente señaló que no cree que la violencia deba enfrentarse con la violencia, o el mal con el mal. Señaló que “la paz y la tranquilidad son frutos de la justicia”.
“No soy partidario de la Ley del Talión, no creo en el ojo por ojo, diente por diente, porque si a esas vamos nos quedaríamos tuertos o chimuelos todos”, señaló.