Eran parte de una manifestación pacífica para pedir justicia por Giovanni López que fue asesinado por los policías en Ixtlahuacán de los Membrillos en Jalisco, presuntamente por no portar cubre bocas, pero con esa premisa comenzaron los disturbios de Jalisco, particularmente en Guadalajara.

Pero la tarde del jueves 4 de junio ocurrió algo que no se tenía previsto de principio y es que al estar frente al palacio de Gobierno de Guadalajara en el centro histórico de Jalisco, un grupo de jóvenes comenzaron los disturbios.

Los seguidores del caso en Twitter opinan que la violencia nunca va a ser la solución pero lo cierto y que también defienden es que se sienten atados de brazos y con la impotencia en un trago amargo en sus bocas, pues no se hace justicia con casos tan aberrantes como estos.

Pero fue en ese momento frente a las puertas de gobierno en la tierra del tequila y los mariachis que algo se detonó y cual bomba, ya no se pudo detener, después claro vino el caso reprobable del joven que prende fuego a un policía.

El policía se encuentra estable y va a entrar a cirugía debido a que durante la agresión se lesionó una rodilla, pero se encuentra bien a pesar de haber sido atentada su vida, su nombre es Rodolfo Esaú y es la primera víctima de lo que pinta para ser una locura de disturbios en todo México.

Los disturbios de Jalisco parecen tener ya sus réplicas y en la Ciudad de México se atiende el terrible hecho del ataque a la embajada de EU, supuestamente como respuesta al abuso policial en Minneapolis, donde falleció George Floyd. Pero muchos lo han tomado como una simple respuesta a los disturbios en Jalisco.

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