Ciudad Juárez, Chihuahua.- El pasado sábado se llevó a cabo la décima edición del evento «Abrazos no muros», una iniciativa que busca reunir a familias de migrantes mexicanos en los Estados Unidos, quienes han estado separados durante años enteros.

El evento se llevó a cabo en la ribera del río Bravo, en la frontera entre Ciudad Juárez y Sunland Park, Nuevo México. En este sitio, las familias mexicanas tuvieron unos minutos para reunirse, abrazar y ver de nuevo a sus seres queridos que se encuentran en el vecino país del norte.

«Abrazos no muros» arrancó su décima edición durante la mañana del pasado sábado. En ambos lados del río, migrantes y familias esperaban el momento para reencontrarse, aunque sea durante unos pocos instantes. En todo momento, autoridades fronterizas, tanto mexicanas como estadounidenses, mantuvieron la vigilancia en ambos lados, para asegurar a los participantes.

La iniciativa es organizada cada año por la Red Fronteriza por los Derechos Humanos (BNHR, por sus siglas en inglés). Junto con ellos colabora la Alianza Reforma de Inmigración para Texas, con el patrocinio del Ministerio de Paz y Justicia de la Diócesis de El Paso. Además, desde 2022, el ayuntamiento de Ciudad Juárez ha colaborado con la realización del evento.

«Es un evento que expresa mucho amor, pero sin duda es de protesta», mencionó Fernando García, director de BNHR. «Es un llamado de atención a la política migratoria que destruye familias, separa padres de hijos, a hermanos; entonces, para nosotros es importante que siga sucediendo mientras más se está cerrando la frontera y criminalizando a la familia migrante». Concluyó.

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