El caso de Paulette resurgió luego de que la plataforma de Straming Netflix, anunciara que realizará una serie sobre la muerte de la menor de cuatro años.

Paulette Gebara Farah, de cuatro años, fue reportada como desaparecida el 22 de marzo de 2010 del departamento de sus padres en una zona exclusiva del Estado de México, 10 días después fue encontrada muerta en su casa bajo el colchón de su cama. Así comenzaba el caso Paulette.

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Peritos expertos en criminología visitaron el lugar e incluso llevaron perros entrenados para encontrar pistas sobre la desaparición de la niña, pero nadie se percató de la existencia del cadáver, localizado hasta el 31 de marzo debido al olor que emitía el cuerpo ya en estado de putrefacción.

A la polémica que desató su desaparición siguió la discusión sobre las conclusiones a las que llegó la investigación: su muerte fue declarada como accidente por el entonces procurador del Edomex, Alberto Bazbaz, quien afirmó que Paulette murió durante la noche después de que se volteara sobre la cama.

Tras las conclusiones, persistieron una serie de dudas, entre ellas, ¿cómo es posible que los peritos peinaran la casa sin encontrar a la pequeña si se encontraba bajo su cama? ¿La madre y las niñeras tampoco la vieron, a pesar de que dijeron haberla buscado por todas partes?

La polémica siguió aumentando cuando se descubrió que la niña estaba allí, bajo el colchón de la pequeña cama, mientras pasaban por la habitación cámaras de video, reporteros y periodistas, mientras concedía entrevistas pidiendo ayuda para encontrarla justo encima de su cuerpo.

Lisett Farah fue exhibida en distintos medios de comunicación como la probable responsable de la muerte de su hija, y las sospechas sobre su presunta culpabilidad aceleraron la ruptura entre ella y su esposo, quien en todo momento pensó que su hija había sido asesinada.

Sin embargo, la conclusión final fue que la posición en la que fue encontrada la menor correspondía a la posición en la que falleció, es decir, que el cuerpo no fue movido en ningún momento. Cerrando así uno de los casos más polémicos en la historia policíaca de México.

El cuerpo de Paulette fue enterrado en el Panteón Francés en Ciudad de México en 2010, antes de que sus restos fueran exhumados e incinerados el 3 de mayo de 2017, después de que las autoridades consideraran que sus restos ya no eran objeto de evidencia para la investigación del caso luego de su muerte.