Aguascalientes, México.- A pesar de la gran crisis sanitaria que vive México a manos de la cepa de Coronavirus COVID-19 no toda la población lo ha tomado en serio. Entre los bromistas, el ataque de histeria y pánico y las desatenciones a las medidas de contención del brote, no se termina de atender el tema.

Mucho se ha hablado de las medidas extremas que se tuvieron que tomar, tales como cerrar las playas porque la población en general no acataba las restricciones. Así también el esfuerzo en masa y de gran importancia de parte de las pequeñas y medianas empresas para cerrar y seguir pagando salarios. A pesar de la falta de apoyo del gobierno federal a ese sector.

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Pero la población mexicana sigue en las calles y no solo los que deben hacerlo para sobrevivir o los trabajadores de limpieza y el sector salud, sino población en general que sale a pasear desatendiendo la pandemia.

Fue en Aguascalientes donde un taxista “bromista” quiso sembrar el pánico en Martha Irene de 57 años de edad. Ella era la pasajera en turno del taxista quien durante el viaje sacó su teléfono móvil y dijo en voz alta en supuesta llamada que él seguía trabajando a pesar de estar contagiado de Coronavirus.

Situación que puso en extrema alerta a Martha Irene quien por supuesto entró en pánico y decidió poner fin al viaje. Ella de inmediato cuestionó al chofer del taxi, a lo que él se burló pues afirmó que se trataba de una broma. Su nombre es Ramiro Eduardo y tiene 27 años de edad. Martha dio aviso a las autoridades, mismas que con ayuda de Protección Civil checaron la salud de Ramiro. Este no presentaba, efectivamente, ningún síntoma de la cepa de Coronavirus COVID-19. Personal de Vialidad detuvo al chofer por sembrar pánico en la señora de 57 años de edad.

Ramiro fue llevado ante el Juez Calificador de la Dirección de Justicia del Complejo de Seguridad Pública Municipal de Aguascalientes junto a su taxi. Ahí se determinará su situación jurídica.