Una turista española perdió la vida este viernes 03 de enero luego de ser atacada por un elefante mientras disfrutaba de un baño en un centro de paquidermos en la isla de Yao Yai, en el suroeste de Tailandia.

Según informaron fuentes de la Policía y del centro ‘Koh Yao Elephant Care’, la mujer se encontraba bañando al elefante cuando este le clavó un colmillo, causándole heridas fatales.

El incidente, que cobró la vida de la turista de nacionalidad española, fue confirmado por el policía Charan Bangprasert de la comisaría de Yao Yai, quien no dio detalles sobre la edad de la víctima.

Una trabajadora del centro también corroboró los hechos, detallando que la mujer se encontraba junto al elefante en el momento del trágico suceso.

Son comunes los ataques de elefantes

Lamentablemente, este tipo de incidentes no son aislados en Tailandia, donde los ataques de elefantes salvajes han cobrado la vida de al menos 240 personas en los últimos 12 años.

Según datos del Departamento de Parques Nacionales, solo en 2024 se registraron 39 víctimas mortales a causa de este tipo de ataques.

El Departamento estima que más de 4,000 elefantes salvajes habitan en santuarios, parques nacionales y reservas naturales de Tailandia, una cifra en aumento pero aún lejos de los 300,000 paquidermos que vivían en el país hace más de un siglo.

Por otro lado, se estima una población similar de elefantes domésticos utilizados en espectáculos turísticos.

Antiguamente, miles de elefantes eran utilizados en la industria maderera hasta que la tala fue prohibida en 1989.

Desde entonces, los elefantes han sido empleados en actividades turísticas como paseos y espectáculos, lo que ha llevado a algunos incidentes lamentables como el ocurrido recientemente en la isla de Yao Yai.

Lavar elefantes y bañarse con ellos se ha convertido en una actividad popular en algunos centros de esparcimiento en Tailandia, atrayendo a turistas ávidos de vivir experiencias únicas.

Sin embargo, los riesgos de interactuar con estos majestuosos animales siguen presentes, especialmente en casos donde los elefantes están en cautiverio o en santuarios donde a veces las condiciones no son las ideales.

Es importante recordar que los elefantes, a pesar de su apariencia pacífica, son animales salvajes que pueden reaccionar de forma impredecible.

Por ello, es esencial respetar su espacio y seguir las indicaciones de los guías y cuidadores para evitar situaciones trágicas como la que costó la vida de la turista española en Tailandia.

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