Un niño de dos años perdió la vista de su ojo izquierdo tras recibir un beso de una persona con herpes labial. El caso ocurrió en Namibia, África, donde el pequeño Juwan contrajo el virus del herpes simple tipo 1 (VHS-1).

Michelle, madre de Juwan, instó a la sociedad para que se prohíba que los menores de edad sean besados por cualquier persona, con el objetivo de prevenir que otros niños pasen por la misma tragedia que ha afectado a su familia.

El incidente tuvo lugar cuando una persona con herpes labial activo besó al niño alrededor de su ojo, lo que provocó la formación de una ampolla y un agujero de 4 mm en la córnea de Juwan. A pesar de los esfuerzos médicos, el daño en el ojo izquierdo del menor fue irreversible y perdió por completo la visión en ese ojo.

La madre de Juwan expresó su incredulidad ante el diagnóstico inicial del médico, quien le informó sobre la presencia de una ampolla febril en la córnea de su hijo. Según la madre, este tipo de lesiones suelen aparecer en los labios o la boca, por lo que resultaba sorprendente que se desarrollara en el ojo del pequeño.

Tras meses de sufrimiento y tratamientos médicos fallidos, Juwan fue sometido a una cirugía en Ciudad del Cabo, donde recibió un injerto de amnios para tratar su córnea dañada. A pesar de los esfuerzos de los especialistas, el niño sigue luchando contra infecciones oculares y complicaciones derivadas de la pérdida de lubricación en su ojo.

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