Durante la madrugada en Florence, Kentucky, se produjo un tiroteo en una casa durante la celebración del cumpleaños de un joven de 21 años, dejando cinco personas muertas, incluyendo al tirador, y tres heridos.
Según el Departamento de Policía local, el sospechoso, de 20 años, no había sido invitado pero conocía a los asistentes.
Las autoridades respondieron a la alerta alrededor de las 3 de la madrugada y encontraron que el sospechoso, tras disparar, se autoinfligió una herida de bala y huyó en coche.
Tras una persecución, perdió el control y acabó en una zanja, siendo llevado a un hospital donde falleció.
Las víctimas mortales, confirmadas por la forense del condado de Boone, incluyen dos mujeres y dos hombres adultos. Los tres heridos están estables en un hospital cercano, y según las autoridades locales, no hay amenazas adicionales para la población.