Un acuario japonés cerrado durante el brote de Coronavirus está pidiendo a las personas que hagan videollamadas a sus anguilas para que las criaturas sensibles recuerden que los humanos existen y no representan una amenaza.

El Acuario Sumida, ubicado en la histórica torre Tokyo Skytree, ha estado cerrado desde principios de marzo y sus animales se han acostumbrado a un entorno en gran parte libre de humanos durante los dos meses de calma. Pero el acuario dijo que la «situación sin precedentes» estaba teniendo algunas desventajas inesperadas.

Las anguilas de jardín son muy sensibles y cautelosas por naturaleza, pero 300 de ellas que viven en un tanque en el acuario se habían acostumbrado a los humanos y rara vez se escondían en la arena cuando los visitantes se les acercaban.

Un portavoz dijo: ‘Las criaturas en el acuario no ven humanos excepto los cuidadores y han comenzado a olvidarse de los humanos. Las anguilas de jardín en particular desaparecen en la arena y se esconden cada vez que pasan los cuidadores», señaló.

Esto está causando dificultades a los cuidadores que intentan controlar la salud de los animales.

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En un intento por reencontrar a las anguilas con los humanos, el acuario está configurando cinco tabletas frente al tanque que alberga a las delicadas criaturas, y los entusiastas de las anguilas deben conectarse a través de iPhones o iPads a través de la aplicación FaceTime.

Una vez que comienzan las videollamadas, las personas deben mostrar sus caras, saludar y hablar con las anguilas. Pero dada la naturaleza tierna de los animales, se pide a las personas que llaman que no griten.

El «festival de exhibición de rostros» está programado para los días 3 y 5 de mayo. La petición del acuario ha atraído mucho apoyo, bajo el hashtag japonés #PleaseRememberHumans.