Ferdinando Orlando, de 25 años, y Lorenzo Costanzo, de 26, llevaron a la víctima a un almacén de mantenimiento del club ubicado en Soho, Londres, y la atacaron mientras ella estaba ebria.

Los dos jóvenes, ciudadanos italianos, escaparon de la justicia durante más de un año después del ataque al regresar a su país de origen. Finalmente fueron detenidos por las autoridades.

La policía obtuvo un video del circuito cerrado de vigilancia en el que se puede ver a los dos hombres chocando las manos y abrazándose después de haber atacado a la joven. Durante el juicio en el que se les dictó sentencia de más de siete años a cada uno, el juez Giles Curtis-Raleigh dijo que habían cometido “delitos muy graves” contra “una joven completamente inocente y vulnerable”.

Agregó que cada hombre tuvo relaciones sexuales con la mujer “en un momento en que ella era incapaz de dar su consentimiento”. Uno de los hechos que el juez consideró como agravante fue que los sujetos presentaron un “comportamiento triunfalista” tras los hechos.

La policía dijo que la mujer, de unos 20 años, requirió una cirugía después del ataque el 25 de febrero de 2017. Además de que también había sufrido un “daño psicológico muy considerable” y que desde entonces le habían diagnosticado un trastorno de estrés postraumático.

La víctima reveló que recordaba haberse sentido con un “dolor increíble” y que apenas podía caminar tras el ataque. Informó que la violación la ha dejado en “miedo constante” e incapaz de relajarse o disfrutar con amigos cuando sale.