Una mujer originaria de Lubbock, Texas, Estados Unidos, evitó que su nieto de 19 años de edad cometiera un tiroteo en un hotel local y se suicidara.

De acuerdo con un comunicado del Departamento de Justicia de Estados Unidos, el pasado 13 de julio, reveló a su abuela que había comprado un rifle de asalto AK-47 y que planeaba utilizarlo en un tiroteo.

Angustiada por la vida de William y de las demás personas, la mujer convenció a su nieto de llevarlo a un hospital, donde al ser interrogado por la policía, el joven dio su consentimiento para que los oficiales registraran la habitación que había reservado en el hotel, donde además del rifle se encontraron cuchillos, municiones y ropa táctica militar.

Los agentes también descubrieron que el joven cambió sus datos en el formulario para la compra de armas de fuego, por lo que ha sido acusado de hacer declaraciones falsas, y en caso de ser declarado culpable podría enfrentar una condena de hasta cinco años de prisión.

“Quiero elogiar a la abuela del acusado, que salvó vidas al interrumpir este complot… Si sospecha que un amigo o ser querido está planeando violencia contra ellos mismos o contra los demás, no dude en buscar ayuda de inmediato llamando a la Policía”, declaró el fiscal federal Nealy Cox.