Durante un viaje en avión pueden ocurrir muchísimas cosas, desde un compañero de asiento molesto y ruidoso hasta turbulencias y empleados malencarados. Sin embargo, uno nunca se imaginaría despertar a mitad de la noche y encontrar el avión vacío y cerrado.

Esto fue lo que le pasó a Tiffani Adams, una mujer canadiense que decidió dormir un poco durante su vuelo entre las ciudades de Quebec y Toronto.

De acuerdo con su relato, cuando despertó se encontró con el avión vacío, las luces apagadas y la aeronave estacionada en la pista de aterrizaje.

Su primer pensamiento fue intentar llamar a un amigo, sin embargo, la batería de su teléfono estaba agotada y resultó imposible cargarla en el avión sin energía.

Buscando soluciones encontró una linterna y logró abrir la puerta principal del avión. En ese momento se dio cuenta que la puerta se encontraba a una altura de unos 15 metros, sin escalera.

Se desconoce cuánto tiempo pasó Adams cerca de la puerta del avión haciendo señales con la linterna antes de que un empleado del aeropuerto la notara. El hombre, que transportaba un carrito de equipaje, quedó sorprendido al verla y pidió ayuda para rescatarla.

Air Canada señaló que está revisando cómo la pasajera fue abandonada en el avión. La pasajera lo calificó de «pesadilla» y dijo que desde entonces ha estado sufriendo de ansiedad y terrores nocturnos.

Adams dice que los representantes de Air Canada le ofrecieron «una limusina y un hotel», se disculpó y dijo que habría una investigación.

«Todavía estamos revisando este asunto, así que no tenemos más detalles para compartir, pero hemos hecho un seguimiento con el cliente y nos mantenemos en contacto con ella», dijo la aerolínea en un comunicado.

Cuando se le contactó para hacer un comentario, un portavoz del Aeropuerto Internacional Pearson de Toronto dijo: «Somos conscientes de la historia de este pasajero y ciertamente podemos sentir empatía por la preocupación que ella debió haber sentido».