La frase “un pan pal susto” es nacionalmente conocida, incluso en la ciudad capitalina se cambia por un bolillo, por ser el pan predilecto de la zona, pero ¿Por qué se dice? ¿Funciona o es un mito?

Cualquier situación tensa puede generar susto en la persona, desde una simple llamada de la pareja con un “tenemos que hablar”, hasta algo más peligro como un asalto.

En cualquier acontecimiento de miedo, la frase de las familias mexicanas es “un pan pal susto” e inocentemente se hace caso.

Es una regla que alguna vez hemos llevado acabo, aunque no sabemos si realmente funcione, bueno ya no te preocupes porque es infalible.

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Al tener miedo, se bajan el nivel de la glucosa y comer pan ayuda a reajustar los niveles de esta sustancia.

Además, se dice que, «el espanto se manifiesta en el estómago, esto genera un aumento en la producción de jugos gástricos por lo que es necesario consumir algo que ayude a asentarlo».

Surge de las viejas tradiciones medicinales en México, donde se recomendaba llevar este pan al estómago para aminorar el impacto.

Esta idea se popularizo y es lo que conocemos ahora, un refrán y solución “pal susto”.