Cansado
Estoy cansado de trabajar y de ver a la misma gente, camino a mi trabajo todos los días. Llego a la casa y mi esposa sirvió lo mismo de la comida para cenar. Voy a entrar al baño y mi hija de apenas un año y medio no me deja porque quiere jugar conmigo, no entiende que estoy cansado. Mi padre también me molesta algunas veces y entre patrones, clientes, esposa, hija, padre, me vuelven loco, quiero paz.
Lo único bueno es el sueño, al cerrar mis ojos siento un gran alivio de olvidarme de todo y de todos.
– Hola, vengo por ti.-
¿Quién eres tú? ¿Cómo entraste?
– Me manda Dios por ti. Dice que escuchó tus quejas y tienes razón, es hora de descansar.
-Eso no es posible, para eso tendría que estar…
-Así es, si lo estás, ya no te preocuparás por ver a las mismas gentes, ni de aguantar a tu esposa con su guisos, ni a tu pequeña hija que te moleste, ni escucharás los consejos de tu padre.
Pero… qué va a pasar con todo?, ¿con mi trabajo?
-No te preocupes, en tu empresa ya contrataron a otra persona para ocupar tu puesto y por cierto, esta muy feliz por que no tenía trabajo.
-¿Y mi esposa y mi bebé?
-A tu esposa le fue dado un buen hombre que la quiere, respeta y admira por sus cualidades y acepta con gusto todos sus guisos sin reclamarle nada. Y además, se preocupa por tu hija y la quiere como si fuera suya y por muy cansado que siempre llegue del trabajo, le dedica tiempo para jugar con ella y son muy felices.
– No, no puedo estar muerto.
-Lo siento, la decisión ya fue tomada.
-Pero…eso significa que jamás volveré a besar la mejillita de mi bebé, ni a decirle te amo
a mi esposa, ni darle un abrazo a mi padre. ¡No, no quiero morir, quiero vivir!,
envejecer junto a mi esposa, ¡no quiero morir todavía!
-Pero es lo que querías, descansar, ahora ya tienes tu descanso eterno, duerme para siempre.
-No, no quiero, no quiero, por favor Dios!
-¿Qué te pasa amor?, ¿tienes una pesadilla?, dijo mi esposa despertándome.
-No, no fue una pesadilla, fue otra oportunidad para disfrutar de ti, de mi bebé, de mi familia,
de todo lo que Dios creó. ¿Sabes?, estando muerto ya nada puedes hacer y estando vivo
puedes disfrutarlo todo.
¡QUE BELLO ES VIVIR PARA PODER SERVIR A MIS SEMEJANTES!
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