Recorrer el camino del amor nunca es algo sencillo, hay demasiados obstáculos en el camino que nos pueden hacer dudar o creer que todo se va a ir por la borda. Las traiciones son uno de los más difíciles de superar, porque una vez que le abres tu corazón a alguien, le entregas toda tu confianza, todo lo que tú eres y las expectativas que tienes en un terreno que es casi desconocido. Pocas personas son capaces de sobreponerse a una circunstancia así para seguir creyendo que pueden amar con todo su corazón. Porque la infidelidad no quiere decir que ya no haya lugar para este sentimiento.

El amor siempre puede surgir en los momentos más inesperados, incluso después de la más grande de las desilusiones. Es la única manera que se tiene de sanar un corazón herido, aunque parece algo tan imposible para quienes se han llevado una decepción. Saber perdonar para empezar de nuevo con una aventura romántica, es el gran dilema que tienen muchas parejas y el que realmente puede demostrar si están destinadas a seguir juntas o no.

Es curioso como las personas siempre nos dejamos arrastrar por todos esos sentimientos negativos que nos carcomen por dentro, el odio, la tristeza, el resentimiento; siempre surgen de donde hubo un gran amor.

Hay quienes piensan que una vez que estos se apoderan de uno, ya no hay vuelta atrás. Pero de vez en cuando te encuentras casos donde no resultó ser así. La gente puede perdonar cuando hay arrepentimiento sincero. El perdón puede funcionar cuando se ama de verdad a la otra persona, siempre y cuando se tenga en cuenta que todos podemos cometer errores, sobretodo si empezamos a descuidar las relaciones que tenemos.

Un romance fuerte no surge de la noche a la mañana, se construye en base a la comprensión.