Anoche tuve un sueño…

Soñaba que entraba a un vivero y caminaba curiosa observando todas las plantas que en diversas especies ahí se encontraban.

Lo más raro era que en cada una de ellas colgaba un cartelito con su nombre. En algunas se leía “Alegría”, en otras “Felicidad” y a medida que iba avanzando podía ver “Amabilidad”, “Paciencia”, “Solidaridad”, “Conciencia”, etcétera.

Caminaba y caminaba y veía cómo cada persona llevaba en sus manos su planta preferida. Veía cómo iban desapareciendo, rápidamente, las que tenían el cartelito de “Dinero”, “Poder”, “Odio”, “Venganza”, y veía a la gente correr para no quedarse con las manos vacías.

De pronto, cuando ya casi no quedaban ni flores ni plantas en el lugar, escuché un llanto que provenía del fondo del vivero. Busqué e inmediatamente hallé a una planta pequeña, casi sin colores. Noté que nadie se había fijado en ella y que ni siquiera tenía agua. Lloraba sin consuelo y fue entonces cuando me acerqué y le pregunté la razón de su llanto. Ella me dijo que nadie la había observado y que llevaba varios años solita sin que nadie la comprara. Fue entonces cuando le pregunté cómo se llamaba y ella me dijo “Gratitud”.