Llévalo al éxtasis con estas técnicas manuales que seguramente le encantarán, ¡pruébalas!
Dibuja suavemente círculos en la cabeza de su pene con un dedo índice, deslízalo hacia el tronco e inmediatamente repite con la otra mano. Después, invierte la dirección del círculo y sigue así.
Manteniendo la forma del anillo en la base, aprieta durante un segundo y eleva tus dedos hasta la cabeza. Forma un anillo con la otra mano y repite. La combinación de presiones lo mantendrá firme.
Coloca las yemas de tus pulgares en la base de su pene y presiona con firmeza, haciendo pequeños círculos en las dos direcciones, hacia la izquierda con el dedo derecho y hacia la derecha con el dedo izquierdo.
En la ducha, colócate detrás y frota tus senos enjabonados contra su espalda y estimula su pene. Cuando esté erecto, aprieta ligeramente y acarícialo de arriba a abajo, puedes usar acondicionador.
Coloca las palmas de tus manos lubricadas una a cada lado del tronco y frota hacia adelante y hacia atrás, como se hace con un madero para tratar de encender una chispa, ¡y la encenderás!
Toma su pene entre tus palmas abiertas y dale pequeños golpecitos de una a otra, como en juego de ping-pong. Los toques rápidos aumentan la circulación en la superficie de la piel y fortalecen la erección.