Aquí te damos la mejor solución para cuando las cosas no se sienten como deberían. Prueba estas posiciones y te aseguramos que llegarás al orgasmo

Experimentar dolor durante el sexo puede ser causado por muchas razones, entre ellas ETS, enfermedad inflamatoria pélvica o vaginismos. Tu cuerpo puede no estar produciendo la lubricación necesaria o puede ser todo psicológico como resultado a problemas de ansiedad. Tal vez simplemente no has probado las posiciones ideales para tu cuerpo.

El final feliz

Si no estás lista todavía y tu galán tiende a tomar las cosas de manera acelerada, aléntalo un poco añadiendo velas y aceite para masajes. Tomen su tiempo para relajarse, y lentamente abre las piernas hasta que te sientas preparada.

De manera gradual deslízate hacia abajo y flexiona tus rodillas elevando tus pompis hasta que estés sobre sus muslos. Usa tu mano para estimular tu clítoris mientras meneas las caderas.

El OMG

Si te sientes un poco desconectada, la meditación orgásmica es para ti. Ésta se trata de estar presente en el momento y ponerte en contacto con tu cuerpo y el de tu pareja. Puedes usar esta técnica para envolverte en el mood.

Recuéstate sobre tu espalda con las piernas abiertas. Mientras tu pareja debe poner su mano en forma de C y levantar la capucha de tu clítoris con su pulgar y estimularte con el resto de los dedos en forma de pequeños círculos.

La estocada

Si su pene es demasiado largo, reduce la probabilidad de sentir dolor haciendo que se acueste de lado  frente a ti con una rodilla flexionada entre ustedes. Toma la base de su pene, así reducirás el largo del mismo y mantendrás la misma sensación de que está completamente dentro de ti.  Tu controlarás la profundidad y la rapidez de la penetración.