Baja el ritmo y sube el éxtasis: Sexo cocinado lentamente y al vapor. Enséñale a tu cuerpo a sentir con todo su potencial, prepáralo para explorar sus posibilidades y dale espacio a cada sensación. Esta noche, tú y tu galán redescubrirán la palabra placer.
Nadie dice que los rounds exprés, salvajes y de media ropa no sean memorables, pero siempre le salimos debiendo mucho al cuerpo, incluso durante los encuentros a ritmo promedio.
«Kissing me softly»
Prueba guiar a tu galán al beso profundo en cámara lenta. Lleven toda su atención, como si tuvieras una cámara mental a un acercamiento extremo al interior de tus labios.
Unan sus bocas poco a poco y trata de hacer consciente cada movimiento de tu cara y tu mandíbula, además sentirás cómo tu saliva aumenta y sientes la necesidad de utilizar tu lengua.
El juego consiste en imaginar que se encuentran besándose en cámara lenta; mientras tanto, que el roce con sus manos sea igual de ligero. Sus cuerpos empezarán a crear más y más expectativa.
Foreplay de experimentados principiantes
¿Recuerdas la sensación que tuviste la primera vez que tocaste el pecho de tu primer novio, sus pompis o su pene? ¿Esa excitación y novedad? Tráela de vuelta, pero, obvio, con todo lo que ya has vivido. Lo mismo con tus sensaciones.
Ninguna olvidamos la primera vez que al fin dejamos que el galán en cuestión pasara a la siguiente base y ¡nos besara las boobies! Si a esas sensaciones le agregas paciencia, la que ahora tienes y que por calenturientas razones no tuvieron tú y tu galán primerizo, verás cómo multiplicas la experiencia.