La gran decepción de la semana se la llevan los habitantes de Saltillo en Coahuila al enterarse que la luz que iluminó su cielo este sábado a primera hora de la madrugada no era un meteorito como se presumía, sino un cohete espacial de prueba ruso.

También se especuló en que fuera el cometa Neowise con fecha presupuestada de avistamiento el 23 de julio pero ni una hipótesis ni la otra tenían razón.

Se trató de un cohete lanzado por Rusia el Soyuz-2-1V que se lanzó al espacio el pasado 25 de noviembre de 2019 y cuyos restos regresaron a la tierra para caer en el Bosque de la Gloria, una parte de la sierra de la comunidad Ojo del Saucillo en Castaños Coahuila.

El cohete se utilizó para poner en órbita a los satélites Kosmos 2542 y Kosmos 254.

La confirmación de los hechos fue hecha por el astrónomo del «Centro Harvard-Smithsoniano de Astrofísica» Jonathan McDowell quien indicó que se trataba de partes del cohete que estaba regresando a la tierra.

Ello resultó una tremenda decepción para los cientos de ciudadanos coahuilenses en Saltillo que sintieron muy cerca el «fin» y creyeron haber grabado un acontecimiento histórico con un meteorito en video, que al final no era.

También te puede interesar: Un éxito la colaboración entre Grupo Intocable y Matisse