En Finlandia, los residentes participan en una tradición deportiva única conocida como Mobile Phone Throwing (lanzamiento de teléfono celular), donde arrojan sus dispositivos móviles a distancias sorprendentes.

Este evento inusual se originó en 2000 en Savonlinna, Finlandia, cuando Nokia, el gigante tecnológico local, dominaba la industria de la telefonía móvil.

Christine Lund, la mente detrás de esta idea, buscaba fomentar la actividad al aire libre y cambiar la percepción de los viejos teléfonos móviles de objetos obsoletos a herramientas de entretenimiento y liberación.

El Mobile Phone Throwing no es solo lanzar objetos al azar; requiere habilidad, fuerza y técnica.

Los competidores no solo buscan lanzar los teléfonos lo más lejos posible, sino también impresionar a los jueces y al público con la calidad y creatividad de sus lanzamientos.

Lo que comenzó como un evento local en Finlandia ahora es una competencia internacional anual en agosto, donde se establecen récords y se muestra la pasión por lanzar teléfonos a su máximo nivel.

Ere Karjalainen, por ejemplo, estableció un récord lanzando un teléfono a 101.46 metros en 2012, mientras que otros, como Dries Feremans de Bélgica y Jan Singleton del Reino Unido, figuran en el Guinness World Records por sus impresionantes lanzamientos de dispositivos móviles.

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