Un niño de nueve años de edad fue encontrado en un bosque de los Urales, en Rusia, el menor estuvo perdido durante dos días.

Según se dio a conocer el pequeño se perdió mientras se encontraba acampando en la zona junto con su padre.

Así mismo, se informó que el niño tuvo que fingir que estaba muerto para salvarse de los osos.

De igual manera, uno de los buscadores que encontró al menor dijo que le pequeño no había ingerido agua de los arroyos.

Lo anterior para evitar sudar y de esta manera lograr que los mosquitos no le picaran.

«Se escondió de los animales, no se asustó y nos sorprendió por su inteligencia y tranquilidad. Cuando lo encontraron, estaba muy preocupado por su papá y por que su mamá le fuera a regañar por sus zapatillas rotas», relataron.

Luego de que se confirmó la desaparición del menor identificado como Kiril, se inició una operación de rescate.

En dicha operación participaron cerca de 160 personas.

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