La ablación más conocida alrededor del mundo es la mutilación de los genitales femeninos, en específico el clítoris; expertos han mencionado que esta terrible práctica tiene importantes implicaciones para la salud física, sexual y psicológica de las mujeres.

Desde hace años que distintos organismos trabajan para erradicar este práctica; puesto que el problema principal  de la misma son los peligros a las personas que forman parte de las comunidades que mantienen esta práctica.

Los investigadores de la Universidad de Bristol dio a conocer que distintos grupos étnicos, cada año, mutila los genitales de tres millones de niñas; las cuales deben ser menores de 15 años.

Se declaró que más de 200 millones de mujeres de todo el mundo han sufrido la mutilación genital; es decir, la extirpación o lesión de sus órganos genitales por razones no médicas; se trata de una práctica que ocurre en privado y sus efectos no son visibles externamente.

¿Pero por qué?

Diversos especialistas comentan que el origen de estar brutal tradición apunta a que su origen está relacionado con el control de los deseos y las conductas sexuales de las mujeres antes y durante el matrimonio; lo que da como resultado mayor certeza de los hombre sobre su paternidad.

Por tal los miembros de las comunidades que realizan la ablación de clítoris creen que disminuye la posibilidad de relaciones prematrimoniales o extramatrimoniales; con lo que, según ellos, se elimina el riesgo para los hombres de criar descendencia que no es suya.

Entre los estragos a largo plazo se incluyen:

• Infecciones
• Complicaciones en el parto
• Dolor crónico para las mujeres

Dentro de un estudio publicado en la revista Plos One, se mencionó:

El tema es suficientemente sensible, y a menudo ilegal; para entender que las personas oculten su apoyo a esta práctica cuando se les interroga directamente. Por eso utilizamos un método indirecto para identificar el apoyo oculto de la ablación.

Tradición letal

En el lugar más común donde se realiza la ablación es en el sur de Etiopía aunque se cree que está en declive. Expertos concluyeron que:

Ambos sexos expresan un bajo apoyo a la mutilación genital cuando son cuestionados directamente, mientras que los métodos indirectos revelan una aceptación sustancialmente más alta (de someter tanto a las hijas como a las nueras a la ablación); los adultos que han asistido a la escuela son más partidarios de la práctica en privado de lo que están dispuestos a admitir abiertamente.

El doctor Mhairi Gibson, declaró que, actualmente, la eliminación de la mutilación genital femenina es un objetivo clave para los responsables de las políticas de salud en las comunidades de alto riesgo, como son partes de África y Oriente Medio; sin embargo, una de las principales barreras para lograr este objetivo es la ausencia de datos de calidad sobre el comportamiento y las actitudes sociales que sustentan esta práctica ilegal.

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Foto: Nuevo Diario