Fue mediante un estudio publicado en el British Journal of Ophthalmology; donde expertos opinaron acerca de la relación que se tenía entre la pérdida de fibras nerviosas; el aumento de células inmunitarias clave en la córnea y el tener COVID  largo.

Esto aunado a las personas que presentaban síntomas neurológicos, como:

• Pérdida del gusto y el olfato
• Dolor de cabeza
• Mareos
• Entumecimiento
• Dolor neuropático

Pero ¿qué es el COVID largo?

Este se caracteriza por una serie de síntomas potencialmente debilitantes que se prolongan durante más de 4 semanas luego de la fase preocupante o aguda; pero afortunadamente solo 1 de cada 10 personas infectadas con COVID-19 desarrollará COVID largo. 

Los estudios para sustentar esto se llevaron a cabo en con la comparación de 40 personas afectadas por COVID-19 vs pacientes sanos; Veintidós (55 por ciento) de los 40 pacientes con COVID no tenían signos clínicos de neumonía; 11 (28 por ciento) tenían signos clínicos de neumonía que no requerían oxigenoterapia; cuatro (10 por ciento) habían sido ingresados en el hospital con neumonía y recibieron oxigenoterapia; y tres (8 por ciento) con neumonía habían sido ingresados en cuidados intensivos.

En cuanto al deterioro de los ojos; se menciona que para comprenderlo hay que saber que la córnea es la parte transparente del ojo que cubre la pupila, el iris y el interior lleno de líquido. Su función principal es enfocar la mayor parte de la luz que entra en el ojo.

Las exploraciones en dicha parte del ojo dieron a conocer que los pacientes con síntomas neurológicos cuatro semanas después de haberse recuperado de la infección aguda por covid-19 presentaban un mayor daño y pérdida de fibras nerviosas en la córnea.

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