La euforia por las cartas coleccionables de Pokémon, o TCG en inglés, es uno de los fenómenos más grandes que le ha sucedido a la IP. No solo volvió a levantar la emoción por un formato algo olvidado por la mayoría fans, sino que también lo llevó a un nivel de atención sin precedentes. Y como suele suceder, esto significa que habrá algo de descontrol, como el más reciente robo masivo de cartas raras que tomó por sorpresa a internet en los últimos días.

Esta es una historia de lo más interesante e inaudita, ya que demuestra la popularidad de la saga, su juego de cartas y el valor exorbitante que estas llegan a tener. Todo comenzó la semana pasada a través de Reddit. En el sitio, un usuario subió unas imágenes en las que se podía ver una caja llena de cartas raras de Mew provenientes de la última expansión del juego.

Cada una de estas cartas puede alcanzar precios bastante elevados, por lo que verlas reunidas en una sola colección y perteneciendo a una sola persona. Debido a esto, muchos miembros de la comunidad notaron unas banderas rojas, por lo que no tardaron en preguntarse de dónde venía dicho material.

Aunque en un inicio se barajó la posibilidad de que fueran copias pirata, la opción pronto se descartó. Las cartas eran auténticas, pero su origen, especialmente en dicho volumen, era completamente un misterio.

Inicia la investigación

Aquí es donde entra en juego la tienda Trading Card World. Este pequeño negocio en Texas, recibió una llamada del dueño de esta colección para venderla. En un inicio, solamente recibieron un video y algunas fotos, lo cual despertó su curiosidad. La naturaleza tan extraña de la situación levantó preocupaciones en Scott Emer, dueño de la tienda, quien decidió proceder con cautela.

De acuerdo a la entrevista realizada por el medio Polygon, Emer tenía un contacto que trabajaba en Pokémon, por lo que no dudó en llamarlo. Una vez hecho el contacto con este conocido y explicada la situación, es cuando comenzó la operación.

Emer recibió instrucciones para solicitar que el vendedor envíe una de las cartas para inspeccionarla. Una vez que este hizo el envío, un representante de The Pokémon Company visitaría la tienda para revisar el contenido y determinar su procedencia.

El plan sale a la perfección, todo en completo anonimato y discreción durante su realización. Es entonces cuando se descubre lo que muchos sospechaban. En efecto, el lote de cartas era robado. No solo esto, sino que Pokémon ya sabía que las cartas habían desaparecido e incluso ya habían detenido al ladrón, lo único que hacía falta era localizar el paradero del contenido para su recuperación.

¿Vale la pena robar cartas de Pokémon?

Debido al alto costo que este tipo de cartas pueden adquirir en el mercado, la idea de un robo no es del todo descabellada. Se han visto unidades de cartas antiguas o de primera edición llegar a las decenas de miles de dólares. Si logras hacerte con al menos una veintena de ellas en óptimas condiciones, tienes asegurado una buena cantidad de dinero.

Probablemente esto fue lo que el ladrón pensó, aunque al final, su plan no resultó como lo esperaba.

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