A sus 21 años, Karen Kyllesø, una joven noruega, logró un hito histórico al convertirse en la persona más joven en llegar sola, esquiando y sin asistencia, al Polo Sur. Sin embargo, al alcanzar su destino, describió la escena como «algo fea» debido a la presencia de edificios y máquinas que, según ella, desentonaban con el entorno natural.

Este logro se produce 114 años después de que el explorador noruego Roald Amundsen fuera el primero en conquistar el Polo Sur. Nacida el 9 de mayo de 2003, Kyllesø recorrió 1,130 kilómetros en casi 54 días, enfrentando temperaturas extremas de -25°C, mientras arrastraba un trineo de 100 kg. «Es una experiencia fantástica, aunque extraña. Después de dos meses en una burbuja, es surrealista regresar a la realidad», declaró a la cadena noruega TV2.

Con este récord, Kyllesø superó al francés Pierre Hedan, quien hasta entonces ostentaba el título de la persona más joven en lograr esta hazaña en solitario a los 26 años. Su viaje estuvo marcado por desafíos, incluidos problemas respiratorios que atribuyó al frío extremo, pero eso no impidió que llegara al Polo Sur con éxito.

Desde joven, Karen ha demostrado ser una aventurera nata. En 2018, a los 15 años, se convirtió en la mujer más joven en cruzar Groenlandia esquiando. Su mentor, Lars Ebbesen, calificó su logro como un «capítulo histórico en la exploración polar». Por su parte, su padre, Håkon Kyllesø, atribuyó su éxito a una combinación de «buenos genes», destacando la pasión de su familia por el esquí y las actividades al aire libre.

Al llegar a su destino, celebró con un plato de pasta boloñesa, ensalada, verduras, un refresco y una copa de champán. El primer ministro de Noruega, Jonas Gahr Støre, elogió a Karen por seguir los pasos de los héroes polares de su país.

Así, la joven Kyllesø une su nombre a la rica tradición de exploradores noruegos que han marcado hitos en la historia polar.

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