Por: Dionel Sena

Un tema que ha marcado agenda esta semana en Durango, fue el supuesto crédito que la Legislatura anterior le aprobó al Gobierno del estado, por el orden de los siete mil millones de pesos, lo que resulta impreciso según lo afirmado por el secretario de finanzas y administración, Jesús Arturo Díaz Medina quien ante lo que se manejó en redes sociales aclaró que de ninguna manera se trató de un crédito, sino más bien de una reestructuración de la deuda bancaria, bajo la justificación de que en este momento existen condiciones para lograr mejores tasas de interés, aclaración que irremediablemente viene a equilibrar la versión anterior que fue utilizada con un claro sesgo político, lo que se entiende ante un proceso electoral en puerta.

Según información pública, el Gobierno del estado en el 2016, recibió una deuda pública total de 14 mil millones de pesos, (entre deuda bancaria y a corto plazo), la cual, según Díaz Medina, se ha logrado reducir de manera sustancial e incluso, se han generado ahorros para el estado, que según esa dependencia se han destinado al abasto de medicamento y atención de la pobreza. Entre las justificaciones que llevaron al Gobierno del estado a hacer una solicitud así, es que la reestructura permitirá de manera responsable, seguir atendiendo los programas sociales en lo que resta de este sexenio, de ahí el que se comprenda el por qué dicha aprobación fue de una mayoría casi absoluta de todas las fuerzas políticas ahí representadas.

Algo de lo que no se ha dicho y que de igual manera se aprobó en el Congreso del Estado este lunes, fue una línea de crédito por el orden de los 980 millones de pesos que será utilizada únicamente, si el Gobierno del estado así lo llegara a requerir en los próximos meses, valorando las necesidades que se vienen para la entidad en el último cuatrimestre del año y la falta de apoyo del Gobierno federal, lo que permitirá que se mantenga la buena operación de todos los programas que maneja dicha instancia gubernamental y al mismo tiempo, le dará cierta autonomía financiera en lo que resta de este 2021, el cual de por sí, ha resultado más complejo de lo que muchos esperaban.

Se debe entender que gran parte de la economía de la entidad depende directamente del gobierno del estado, por lo que dicha reestructuración de la deuda bancaria, podría sonar hasta cierto punto justificada, pues hoy en día hay mayor claridad para saber en qué se emplean cada uno de los recursos públicos destinados a una entidad ya sea por asignación federal o a través de un crédito, por lo que no debería haber mayor problema en darle un seguimiento a este dinero para saber en que termina aplicándose, por lo que de haber alguna irregularidad seguramente que se denunciará, sin embargo, de ser aplicados en los rubros comentados, entonces también deberá reconocerse con mucha puntualidad dicha claridad y alejado de cualquier tinte político.

Twitter: @dionelsena