Como parte de una estrategia institucional que busca dignificar a las personas fallecidas no reclamadas, el Instituto Jalisciense de Ciencias Forenses (IJCF) y la Fiscalía del Estado inhumaron este lunes a 21 personas identificadas pero que no fueron reclamadas por sus familiares, en el Panteón Guadalajara.

Los cuerpos, plenamente identificados gracias a dictámenes forenses multidisciplinarios —como necropsia, antropología, odontología, criminalística, genética y lofoscopía— fueron ingresados individualmente en ataúdes y sepultados en tumbas verticales, con localización precisa, para que sus familiares puedan visitarlos en el futuro.

El proceso responde a una labor coordinada entre el IJCF, la Fiscalía Estatal y la Secretaría de Inteligencia y Búsqueda de Personas (SIBP), que en lo que va del año ha logrado localizar a familiares de 258 personas fallecidas que se encontraban sin reclamar en el Instituto. En estos 21 casos, los familiares identificaron a sus seres queridos, pero por diversas circunstancias no pudieron realizar el trámite de entrega y autorizaron su inhumación.

“La intención es que descansen en un espacio digno, con su expediente completo y que su familia tenga la posibilidad de visitarlos”, informaron las autoridades durante el operativo.

Los gastos derivados del registro de defunción y los trabajos funerarios fueron cubiertos por el IJCF. La dependencia recordó que el trámite para reclamar a una persona fallecida es gratuito y solo puede ser gestionado por familiares directos. Para ello, deben presentar documentación como actas de nacimiento, identificación oficial, actas de matrimonio (cuando aplica) y fotografías recientes del familiar desaparecido.

Asimismo, la SIBP continúa impulsando una campaña de recolección de muestras genéticas para cotejar con el banco de perfiles del IJCF. En colaboración con gobiernos municipales, se han habilitado módulos itinerantes en diversas regiones del estado para acercar este servicio a las familias de personas desaparecidas.